El Arzobispo de Valencia, Cardenal Agustín García-Gasco, alentó a los legisladores a "acoger, respetar y promover los derechos específicos de la familia en los ordenamientos jurídicos", y a los medios de comunicación, a "ejercer su especial responsabilidad en la promoción del respeto por la familia y resaltar su belleza".
En su carta de esta semana titulada "La familia, educadora de la paz", el Purpurado hace un llamado a apoyar y defender a la familia porque es "la primera e insustituible educadora de la paz".
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En su misiva, el Cardenal García-Gasco evoca las palabras del Papa Benedicto XVI en su reciente Mensaje de la Paz en el que señaló que "la negación o restricción de los derechos de la familia, al oscurecer la verdad sobre el hombre, amenaza los fundamentos mismos de la paz". La misión de la familia "es tan esencial para el servicio de la paz que merece ser ayudada en todas sus necesidades", añade Arzobispo de Valencia.
El Cardenal destaca que "en la sana vida familiar se experimentan algunos de los elementos más esenciales de la paz". En la familia, explica, los hermanos "aprenden a relacionarse con justicia y amor"; los padres, a ejercer "la autoridad para el bien de todos y cada uno de los miembros de la familia, para el bien común familiar"; los niños pequeños, los ancianos y los enfermos, a recibir "un servicio afectuoso que les expresa un amor de predilección".
Refiriéndose a los medios de comunicación "tienen un gran potencial educativo, y por ello pueden ejercer su especial responsabilidad en la promoción del respeto por la familia, ilustrar sus esperanzas y derechos, resaltar su belleza".
El Purpurado considera que la familia "tiene el deber de educar a sus miembros en la paz, en la justicia, en la libertad, en la solidaridad, en el amor". Para cumplir con este deber, la familia "tiene unos derechos específicos que los ordenamientos jurídicos han de acoger, respetar y promover".