El Presidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), Mons. Ubaldo Santana, indicó que la unidad del Episcopado de ese país es el mejor servicio que los obispos pueden ofrecer.
El también Arzobispo de Maracaibo dijo al iniciar la Asamblea de la CEV, que "tras orar, reflexionar, los obispos entendimos que el mejor servicio que debemos dar en el momento de antagonismo que vive en este momento el país, es luchar para mantenernos unidos, trabajar por la unión y tender puentes entre los puntos en conflicto".
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Seguidamente expresó que "el resultado del referéndum reflejó la intención de los venezolanos de avanzar. No quieren dar saltos en el vacío, ni estancarse, ni volver atrás, ahora le toca a los líderes trabajar sin exclusión y en beneficio de todos".
Luego de reiterar que las medidas de amnistía deben extenderse a más personas, el Prelado venezolano destacó que el pasado 2007 fue un año trascendental para Venezuela por el debate que produjo la reforma constitucional y recordó que la Iglesia tuvo su participación dentro de este debate como "pastores, no como operadores, ni defensores de un bloque", por lo que tildaron de "injustas" las descalificaciones del Estado por instar a la población a participar en el proceso.
Asimismo denunció que en el país se siguen presentando violaciones a los derechos fundamentales por la persistencia de la inseguridad, la precaria situación de los detenidos por motivos políticos, así como el deterioro del estado de los procesados y condenados en los diversos retenes del país y la corrupción.
Sobre el deterioro de las relaciones con Colombia, Mons. Santa indicó que se debe intensificar la oración para evitar que las tierras de ambos países se usen como espacios para negocios ilícitos.