El Obispo de San Cristóbal, Mons. Mario Moronta, llamó a los católicos a trabajar por la reconciliación de Venezuela, especialmente en los momentos actuales, asumiendo una actitud permanente de apertura de mente y de corazón; e indicó que el Adviento y la proximidad de la Navidad son momentos propicios para hacerla realidad.
“Hoy hablamos y oímos hablar de reconciliación. Esta no es una realidad que se decreta y se cumple. Es una actitud permanente que supone una apertura de mente y de corazón para poder hacerla real”, expresó el Prelado en su mensaje por Adviento.
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Advirtió que de nada valdría hacer pesebres y adornar nuestras casas, o enviar saludos “si los católicos y, por tanto, la Iglesia no se convierten en una nueva gruta de Belén donde vuelva a sentirse la presencia del Dios-con-nosotros que vino a salvar al mundo y no a condenar a la humanidad”.
“Este adviento -señaló el Obispo-, ante la particular situación que vive nuestra patria, debe ser un tiempo en el que la Iglesia demuestre que es servidora de todos ejerciendo el ministerio de la reconciliación”.
En ese sentido, recordó que los católicos están llamados a tender “puentes para el encuentro, para conseguir la sintonía y el diálogo” y reconciliar al país.