El diario español La Razón destacó que la presión de los grupos católicos especializados forzó el cierre de polémicos centros abortistas en Barcelona, donde por altas sumas de dinero se practicaban abortos hasta el octavo mes de gestación.
Según el diario, la acción de los católicos "ha logrado que el aborto vuelva a emerger a la superficie. La denuncia interpuesta por la plataforma E-Cristians ante el juzgado de instrucción número 33 de Barcelona y admitida a trámite en julio tuvo su respuesta el pasado 26 de noviembre, cuando la jueza del caso ordenó el precinto de cuatro centros abortistas relacionados con el ginecólogo Carlos Morín".
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Asimismo, el diario reconoció el papel de HazteOír.org que la semana pasada convocó una concentración frente al Ministerio de Sanidad en Madrid y exigió a su titular, Bernat Soria, "que investiguen los establecimientos abortistas y, una vez que comprueben cómo incumplen lo dispuesto en la ley de despenalización del aborto, los cierren".
La razón mencionó también al Instituto de Política Familiar, "otra plataforma de raíces cristianas, ha redoblado sus esfuerzos en favor de la vida desde la decisión judicial de clausurar los cuatro centros abortistas de Barcelona. Su presidente, Eduardo Hertfelder, remitió el lunes una carta al ministro de Sanidad ‘exigiendo la publicación inmediata de los datos de defunciones por aborto del año 2006’".
Finalmente, cita al presidente de la Asociación Provida de Madrid, Jesús Poveda, quien se ha sumado a las denuncias contra los centros abortivos. "Poveda, una figura señera en la causa pro-vida, ha manifestado su alegría por la clausura de las clínicas y ha recordado que ‘en cada aborto muere un niño y llora una mujer’", indicó el diario.