El Arzobispo de Santo Domingo, Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, advirtió que "las leyes que ponen en discusión el matrimonio entre hombre y mujer nacen de una concepción enferma del mundo".
En una entrevista concedida al diario italiano Il Messaggero de esta capital, donde asistió al Consistorio en el que el Papa Benedicto XVI nombró 23 nuevos cardenales, consideró que "es difícil entender cómo la gente inteligente no comprende que así se debilita el futuro de la sociedad".
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El Cardenal López Rodríguez se preguntó por qué tantos parlamentarios "no destinan esfuerzos y energías en leyes más útiles". "¿Cómo se puede legalizar la supresión de una vida humana?", agregó.
"La mujer no tiene derecho a elegir. Ha sido creada por Dios para acoger la vida y defenderla, no para destruirla. Ni siquiera en el reino animal se llega a tanto horror. Solo el ser humano piensa que tiene el derecho de matar a sus propios hijos. Solo Dios es el dueño de la vida", insistió.
Asimismo, recordó que la Iglesia siempre defenderá la vida y protestará "ante leyes malvadas" protegiendo el derecho a la objeción de conciencia pues es su misión "proclamar el Evangelio en el mundo actual, a pesar de que está sordo".
"En este momento no hay ninguna institución que pueda compararse a la Iglesia en cuanto a credibilidad. La gente cree en los hechos, en lo que ve. La Iglesia es siempre la primera en intervenir para ayudar, para socorrer, para resolver y para mediar", precisó.
El Purpurado manifestó que quien "sirve a la causa de la vida está en el camino del progreso. Suprimir la vida humana y pensar en legalizar el aborto, la investigación con embriones, la clonación... esto es oscurantismo, cosas de la Edad Media".
También explicó que es incorrecto definir a la Iglesia como eurocéntrica porque "nació en Oriente Medio, se ha trasladado a Europa y de allí se ha difundido a América, es la primera realidad de verdad global".