El Papa Benedicto XVI envió un telegrama con sus condolencias por el reciente fallecimiento en Tokio, a la edad de 77 años, del Cardenal Stephen Fumio Hamao, Presidente Emérito del Pontificio Consejo para la Pastoral de los Migrantes e Itinerantes.
En el mensaje enviado al Obispo de Yokohama y a los familiares del Cardenal Hamao, el Pontífice expresa su gratitud por el testimonio del Purpurado, su cercanía a los pobres y su generoso servicio a la Iglesia. "Confío a la misericordia de Dios el alma de este hijo, orgullo del pueblo japonés".
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El Santo Padre también envió su pésame a la embajada de Japón ante la Santa Sede. En este mensaje el Pontífice indica que "el Purpurado trabajó con gran dinamismo y presencia en favor de los migrantes, una de las temáticas más importantes para la comunidad internacional. También es significativo su contribución en las relaciones entre la Santa Sede y Japón".
Asimismo, Benedicto XVI envió otro telegrama a Teresa Teruko Uematsu, hermana del Cardenal, en el que asegura su oración por el eterno descanso del fallecido y pide para sus familiares "el consuelo y la paz que nacen de la firme esperanza" en las promesas de Cristo.
Nacido en Tokio, el Cardenal Hamao estudió Derecho Canónico en la Pontificia Universidad Gregoriana en Roma. Fue ordenado sacerdote a los 27 años, y ordenado Obispo Auxiliar de Tokio y luego Obispo de Yokohama. Llegó a ser Presidente de Cáritas de Asia y Oceanía. En 1998 Juan Pablo II lo nombró Presidente del Pontificio Consejo para la Pastoral de los Migrantes e Itinerantes y lo creó Cardenal en 2003.