Un representante de la Comisión de Relaciones Exteriores de EEUU mostró en el pleno del Senado un video del ultrasonido de un bebé de 10 semanas, en el que se le aprecia dando pataditas en el vientre materno, para recordar que "reconocer y proteger la vida es el núcleo del debate sobre la política de Ciudad de México", que prohíbe financiar con dinero de los contribuyentes de Estados Unidos el aborto como método de "planificación familiar".
Mientras se dirigía a los demás representantes, el republicano por New Jersey, Chris Smith, pedía a todos que mirasen "al niño no nacido de 10 semanas que aparece en el video, moviéndose, volteándose, estirándose. Ahora sabemos que en el segundo trimestre los bebés tienen la capacidad de sentir dolor".
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Smith también recordó que "la vida humana comienza en el momento de la concepción. Cada segundo después de ella es una etapa del desarrollo. Al día 22 el corazón empieza a latir y se detectan ondas cerebrales al día 44. En la quinta semana las pequeñas manos y pies comienzan a desarrollarse y en la sétima semana el bebé ya está pateando y nadando en el vientre materno".
"El aborto es violencia contra los niños. Es un abuso infantil extremo. Las generaciones futuras se preguntarán por qué no lo entendimos: los bebés no nacidos incluso cuando son ‘no deseados’ tienen dignidad, y son infinitamente valiosos. Y por eso mismo son muy vulnerables, por lo que el gobierno debe proteger sus derechos humanos", prosiguió.
"Hoy -denunció Smith- muchos países en todo el mundo están bajo el ataque de una campaña bien coordinada y financiada para revertir las políticas de naciones soberanas que protegen a las mujeres y niños de la violencia del aborto. Estas presiones que ponen a las madres y sus hijos en riesgo -y ahora quieren que nosotros como contribuyentes también lo hagamos- buscan facilitar, permitir y legitimar sus actividades mortales".
"El desafío que se nos presenta es cuidar y asistir tangiblemente a la madre y al no nacido", precisó.
Finalmente, Smith destacó que "nadie es desechable. La vida de nadie es barata. La vía humana que tenemos por delante tiene que ver con proponer e implementar políticas que respeten, protejan, asistan y defiendan tanto a las madres como a sus hijos de todo tipo de amenazas, especialmente el aborto".