El Presidente de la Comisión de Medios de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV), Mons. Baltazar Porras, rechazó las acusaciones de algunos sacerdotes que están promoviendo el chavismo y se dicen miembros de la teología de la liberación impulsora de una “iglesia popular”. Para el Prelado esto simplemente busca desviar la atención actual sobre la reforma constitucional.
El también Primer Vicepresidente del CELAM expresó en declaraciones a Unión Radio que sta situación " no es sino una copia al carbón de lo que pasó en los años del sandinismo en Nicaragua” con “un grupo de sacerdotes que se dedican a denigrar, calumniar y a decir cosas que simplemente rayan en lo increíble para no hacer otro tipo de calificativo".
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Para el Arzobispo de Mérida, las declaraciones del rector de la Universidad Santa Rosa y de voceros del oficialismo contra el Cardenal Urosa buscan “denigrar de una forma grosera a la Iglesia”.
"Invito a cualquiera a ver la vida que llevan los sacerdotes, la cantidad de sacerdotes que están en las zonas populares y las dificultades de todo tipo” lo que certifica que no se puede decir que “se vive en la opulencia y que se está en planes subversivos con lo más rancio de la oligarquía”, dijo Mons. Porras.
“Todas esas cosas sencillamente tienen una explicación. Este grupo de sacerdotes lo que quieren es exacerbar la paciencia para que se tomen las medidas canónicas, que están perfectamente permitidas. Todo esto pretende desviar la atención y los efectos que pueda tener la Iglesia como institución sobre la reforma constitucional", sobre la cual ya se han manifestado los obispos en el documento “Llamados a vivir en libertad” en la que denunciaron que la reforma constitucional de Chávez es “moralmente inaceptable”.
"Es moralmente inaceptable lo que se proponen (con la reforma constitucional), no solo por los principios. Ojalá que los pobres se den cuenta que estamos es en defensa por la posibilidad de que ellos vivan mejor, que vean cómo les toca la impunidad, de los hijos que les matan, la justicia que no aparece y que hay que vivir de la limosna gubernamental para obtener vivienda, para obtener trabajo", agregó el Presidente de la Comisión de Medios de la CEV.
Tras comentar que han recibido muestras de solidaridad de otros sacerdotes y obispos por los continuos ataques de Hugo Chávez, el Primer Vicepresidente del CELAM manifestó que los sacerdotes que buscan respaldar al chavismo y que “ahora aparecen como adalides de la teología de la liberación y de los pobres, le están haciendo un flaco servicio a esta misma tendencia porque esta teología emergió de una crítica al poder, y si en algo tiene sentido el pensamiento religioso ahora caen en ser lacayos para sostener este gobierno".
"Nunca como ahora hemos tenido a todos estos gobernantes nuestros dicen que son católicos, apostólicos y romanos para luego poder insultar. Algunos de ellos si no es por la generosidad de un sacerdote no hubiesen terminado ni sus estudios primarios y ahora sacan toda esa lava que tienen dentro de sí, todos esos complejos e insatisfacciones queriendo volcarlos contra la Iglesia porque está señalando el punto clave y central que es la inaceptable, desde el punto de vista moral y por muchos aspectos, la reforma constitucional. Una reforma que no favorece sino la consolidación del poder y que es presentada como piel de cordero, es decir muy atractivo, y no es tal", indicó el Arzobispo.