El primer Vicepresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), Mons. Roberto Lückert, calificó a la reforma constitucional emprendida por el Presidente Hugo Chávez como “el traje a la medida para un militar”; e indicó que el interés de someterla a un referendo es para hacer creer a la opinión pública internacional que Venezuela es un país democrático y “lamentablemente no es así”.
“Aquí se nos esta imponiendo un militarismo democrático, mal llamado democrático; pues esto va a ir a consulta, a referendo, y va a parecer ante la opinión pública internacional que esto es un país democráticamente constituido donde las cosas se hacen por votación, y lamentablemente no es así. Es la voluntad de un caballero que tardó seis meses en hacer una reforma y ahora nos impone tres meses para poderla aprobar”, expresó el Prelado a Unión Radio.
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Mons. Lückert criticó también que el Presidente plantee la reelección indefinida porque con ello liquida la alternancia en el poder. Añadió que no dar suficiente tiempo para que el pueblo debata este proyecto “no es democrático”.
Obispos se reúnenEl también Arzobispo de Coro anunció que hoy y mañana miércoles los obispos se reunirán para analizar el texto enviado por Chávez a la Asamblea Nacional; y que podrían ser los encuentros previos a una reunión extraordinaria de la CEV en octubre, donde se fijaría una posición oficial.
“En primer lugar hoy comenzamos un trabajo a nivel de la directiva de la Conferencia, y mañana habrá una reunión ampliada de la comisión permanente, no solamente se invitó a los obispos de la Comisión sino que se abrió un poco más para los que quisieran asistir”, informó.
Explicó que hoy habrá una “preinformación en lo que es la reforma, las consecuencias que tiene, las bondades, las debilidades; porque nosotros no somos constitucionalistas, somos pastores y tenemos que buscar a alguien que nos informe, nos ayude sobre el proyecto de la reforma constitucional”.
Agregó que la reunión de mañana “será más ampliada y saldrán algunas líneas muy concretas de lo que nosotros como obispos tendríamos que hacer en función del estudio de esa reforma”.