El Secretario Ejecutivo del Consejo de Relatores de Derechos Humanos de Cuba y Presidente la Fundación Cubana de Derechos Humanos, Juan Carlos González Leiva, denunció el maltrato físico al que fue sometido por agentes de Seguridad del Estado, quienes lo arrestaron en la Sala Penal del Hospital Provincial de Camagüey Amalia Simoni cuando iba a entrevistar a un hijo de un prisionero de conciencia.
"El hecho se produjo (el 26 de agosto) cuando estábamos queriendo entrevistar a Michael, un discapacitado en silla de ruedas quien es hijo de crianza del prisionero de conciencia José Antonio Mola Porro", relató González en comunicación con ACI Prensa, e indicó que junto con él fueron arrestados y agredidos el periodista independiente Luis Esteban Espinosa Echemendía y Eisy Marrero Marrero, miembro del Consejo de Relatores de Derechos Humanos de Cuba.
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En su comunicación, informó que los agentes policiales los encerraron "en la sala de penados y tuberculosos" del hospital y, tras requisarlo a la fuerza, los metieron a golpes en un patrullero y entre varios policías le arrancaron su filmadora y sus cassettes de video.
González, quien además es un abogado invidente, dijo que fueron llevados a la unidad policial de Avellaneda, donde nuevamente a la fuerza los metieron a un calabozo tapiado, caluroso y sucio; dejándolos por tres horas. "Después, me dejaron en libertad diciéndome que todo había sido una confusión", señaló y responsabilizó del atropello al Gobierno cubano, y pidió "la solidaridad de la opinión pública internacional y la comunidad de los Estados".