En una enérgica columna periodística, el P. Hugo Valdemar Romero, director de Comunicación Social de la Arquidiócesis de México, desafió al periodista del diario de fuerte influencia masónica anti-católica La Jornada, Gabriel León Zaragoza, a demostrar afirmaciones que tratan de cuestionar la legitimidad del apoyo de las organizaciones laicales al Cardenal Norberto Rivera Carrera.
León Zaragoza, acusado de ser pagado por La Jornada para agredir sistemáticamente a la Iglesia Católica y al Cardenal Rivera, había señalado en un tendencioso artículo que el apoyo masivo que el Purpurado mexicano recibió el pasado domingo en la Catedral había sido “digitado” por algunos católicos que se habían arrogado el título del laicado local.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
El P. Valdemar Romero desafió a León a demostrar su afirmación y lamentó la “calumniosa nota del reportero Gabriel León, quien descaradamente lanza ataques continuos a la Iglesia Católica, al parecer ya por consigna de la línea editorial de La Jornada”.
“Por todos en la Catedral es sabido que domingo a domingo el señor Gabriel León llega a cubrir la información que se genera en la Misa dominical del señor cardenal después de la homilía, esto es, cuando faltan cinco o 10 minutos antes de que termine la ceremonia; no obstante, a pesar de que no atestigua físicamente lo que en el templo ocurre, es capaz de inventar e improvisar sus notas con lo primero que se le ocurre, en su visión siempre hiriente hacia la Iglesia”, indica el sacerdote.
Asimismo, lamenta que León cada domingo exija “con arrogancia y prepotencia entrevistas y declaraciones exclusivas, haciendo a un lado el respeto por sus propios compañeros, quienes tienen el mismo derecho que La Jornada a la información, sin privilegiar o despreciar a ningún medio de comunicación”.
Dirigiéndose al reportero, el Padre Valdemar Romero sostiene que si “se toma la molestia de analizar las fotografías de su archivo se dará cuenta de que gran número de fieles que este domingo expresaron públicamente su apoyo al señor cardenal acuden con frecuencia a la Misa, con lo que se descarta una calumnia más: que fueron acarreados a la Catedral”.
“Lamentamos profundamente la poca objetividad con que el señor Gabriel León trabaja sus notas, en donde cualquier lector puede descubrir más odio hacia la Iglesia que deseo de informar con la verdad”, sostiene.
Los errores de LeónEn su columna, el sacerdote aclara algunos de los errores de la nota firmada por León el lunes pasado, “porque el público de La Jornada merece ser informado con la verdad y sin concesiones”.
“Gabriel León menciona: ‘En esta ocasión se presentó el grupo Movimientos Laicales de la Arquidiócesis de México, quienes hicieron un reconocimiento...’ Esto es un error. La Comisión de Movimientos Laicales de la Arquidiócesis de México no es un 'grupo', sino una instancia de la Arquidiócesis de México que regula y coordina a las diferentes asociaciones laicales en el Distrito Federal”, aclara el sacerdote.
“Más adelante asegura: ‘Ricardo Uribe, quien junto con su esposa de autodesignan presidentes de los 52 movimientos de esta agrupación...’ Otra vez un error. Cada grupo eclesial tiene sus métodos, estatutos, estructuras y formas de participación. Ricardo Uribe y su esposa, al frente de la Comisión de Movimientos Laicales, retoman las inquietudes surgidas en los grupos y les dan voz”, precisa el sacerdote.
Asimismo, rechaza que “sin mencionar nombres ni pruebas de su dicho, Gabriel León afirma que miembros de la Escuela de Pastoral fueron conminados a escribir leyendas en pancartas y cartulinas por ‘alguien o algo’ que deja de mencionar en su nota”.
“Todas estas falsedades sólo denotan la ligereza y el desconocimiento de la fuente religiosa que el señor León dice cubrir”, lamenta el sacerdote.
Ejemplo de manipulaciónLeón no solo escribió la criticada nota del lunes, en la que convirtió en insignificantes a los movimientos católicos más numerosos de México, sino que este martes publicó una nueva pieza en que convirtió en relevantes a diminutas organizaciones de fachada, existentes solo en el papel en el que se imprime La Jornada.
Con el título “Organizaciones católicas piden a Rivera Carrera que asuma su responsabilidad”, el periodista de La Jornada recoge declaraciones de representantes del Secretariado Internacional Cristiano de Solidaridad con los Pueblos de América Latina (SICSAL), definido como una “red cristiano ecuménica” con sede en Nicaragua, y el Observatorio Eclesial, que agrupa a varias organizaciones anticatólicas como las feministas abortistas autodenominadas “Católicas por el Derecho a Decidir”.
empujar su agenda radical