Con ocasión de la ordenación de un nuevo presbítero para su diócesis, el Obispo de Tarazona, Mons. Demetrio Fernández, señaló que lo que necesita urgentemente el mundo y la Iglesia hoy es la presencia de sacerdotes santos que vivan y expresen con gozo comunión cpn el Sucesor de Pedro y su obispo.
Durante la Misa en la que consagró este domingo al diácono José Antonio Zazu Lafuente, el Prelado señaló que los sacerdotes deben vivir “con gozo la comunión eclesial” y no tener la actitud que tienen algunos de sentir “vergüenza de vivir en comunión con el Papa y con el Obispo propio”.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Algunos de ellos, lamentó, “se glorían de disentir, de oponerse, de ser críticos, como si eso les hiciera ser más. No deja de ser una postura de adolescentes, que se deja llevar del espíritu del mundo”.
Ante ello, pidió al ordenando que, por el contrario, viva interiormente y exprese de manera continua su “comunión con el Papa, hoy Benedicto XVI, ayer Juan Pablo II, mañana el que Dios nos dé”. Expresa, pidió al futuro sacerdote, “que lees y te adhieres de corazón a sus enseñanzas. Que propones su doctrina como signo de comunión con el Magisterio auténtico de la Iglesia, sobre todo en los temas de fe y de moral”, añadiendo que “el Papa necesita tu oración” y que “tú necesitas vivir y expresar tu comunión con el Papa”.
Respecto a la comunión con su obispo, Mons. Fernández señaló que “un presbítero no se entiende” sin éste, “del que es cercano y directo colaborador en la tarea ministerial”. Así, pidió al sacerdote “no dejarse llevar del comentario fácil, que seca el alma y frena los impulsos apostólicos, de considerar al obispo como jefe de una patronal y a los curas como miembros de un sindicato”.
“Cuando ahora prometas obediencia y respeto a tu obispo –continuó el Prelado dirigiéndose al ordenando– hazlo con el deseo de vivir sometido por amor toda tu vida al obispo con quien has de colaborar en el ministerio sacerdotal. Considera a tu obispo como un padre, como un amigo, como un hermano mayor. No le tengas miedo, él te tendrá siempre por hijo y por hermano”.
Un santo sacerdote
Durante la Misa presidida en la Colegiata de Santa María de Borja, el Obispo señaló asimismo que “la vocación sacerdotal no es solamente una opción personal, y menos aún una ocurrencia que nos llega inesperadamente ni una idea fija por la que hay que luchar” sino “ante todo y sobre todo un don de Dios” por lo que hay que “pedirle a Dios continua e insistentemente que envíe obreros a su mies”.
Al profundizar en la identidad sacerdotal, el Obispo de Tarazona subrayó el llamado a ser un “sacerdote santo”. “Santo es el sustantivo. Sacerdote es el adjetivo”, precisó.
“Un sacerdote santo hace más bien a la Iglesia que veinte sacerdotes mediocres. Necesitamos sacerdotes santos. La Iglesia necesita sacerdotes santos. El mundo espera que los sacerdotes sean santos”, dijo.
Igualmente, recordó que en el ministerio sacerdotal, “una de las principales tareas es la oración abundante”. “Las tareas apostólicas pueden esperar, el estar con el Señor es inaplazable. Haz de la Palabra de Dios tu alimento permanente. Reza la liturgia de las horas completa todos los días. Prepara tu corazón para celebrar la eucaristía. No te olvides de mirar con amor y gratitud a María, en el rezo del rosario, para agradecerle que nos haya dado a Jesucristo y sea nuestra verdadera Madre”.
Finalmente, el Obispo pidió al ordenando vivir su “consagración a Dios en el celibato con delicadeza y esmero”, exhortándole a que “ni en tus palabras, ni en tu comportamiento, ni en tu porte insinúes nunca que tu corazón no está enamorado del Señor”.
corazón libre para amar a todos siempre