“Es necesario preservar la identidad de la escuela católica”, señaló el Arzobispo de Santiago de Compostela, Mons. Julián Barrio Barrio durante la apertura de la Asamblea General de la Oficina Internacional de Educación Católica (OIEC).
El Prelado indicó que la especificidad de la escuela católica está en “el servicio a la formación integral, siendo un proyecto en el que la fe católica se presenta en diálogo con la cultura y en el que Dios es su fundamento primero y último”. Luego refirió que es el momento para “incentivar la renovación de la escuela católica y clarificar el servicio educativo que está aportando a la sociedad”.
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En otro momento Mons. Barrio denunció la existencia de “corrientes filosóficas y educativas que potencian los saberes científico-técnicos” reduciendo “la razón a lo instrumental”, provocando que la fe sea “recibida como extraña.
“En consecuencia, no se da cabida a los valores trascendentales, dejando a muchas personas en el imperio de lo efímero, en un viaje a ninguna parte y carentes de orientación más allá de lo que la razón científica pueda proporcionales” comentó.