En un breve comunicado, el Obispo de Richmond, diócesis en la que se encuentra la Universidad Virginia Tech, deploró el trágico tiroteo que ayer dejó 33 muertos y decenas de heridos en este centro de estudios, ofreció sus oraciones por las víctimas y consuelo a todas las familias.
“Los inesperados asesinatos en el campus de Virginia Tech nos apenan profundamente y nuestros corazones están con los padres y las familias de aquellos hijos e hijas que fueron asesinados o heridos”, señaló Mons. Francis X. DiLorenzo.
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El Obispo, que cumplió años el domingo, se enteró de la tragedia mientras almorzaba por esta ocasión con su equipo de trabajo. “Realmente me sentí afectado”, dijo, cuando supo que dos mujeres presentes en su celebración tienen hijos que estudian en Virginia Tech, poco después supieron que los jóvenes estaban ilesos.
“Es tremendamente triste pensar en los inagotables años de compromiso de amor y cuidado que estos padres han dedicado a sus hijos y luego todo se interrumpe por una bala”, señaló el Prelado y luego expresó sus condolencias y oraciones a todos los familiares de las víctimas.
Steve Neill, editor del periódico “The Catholic Virginian” en Richmond, declaró a CNA, agencia que pertenece al Grupo ACI, que Mons. DiLorenzo estará en Blacksburg para celebrar una Misa por las víctimas de la masacre y ofrecer personalmente ayuda a quienes han perdido a sus seres queridos.