El Arzobispo de Cracovia, Cardenal Stanislao Dziwisz, celebró una Misa en las Grutas Vaticanas, donde se haya la tumba del Siervo de Dios Juan Pablo II, al conmemorarse hoy el segundo aniversario de su fallecimiento.
"Ha vuelto a la Casa del Padre pero continúa estado presente en la vida de la Iglesia. El primer testigo de esto es el Papa Benedicto XVI. Juan Pablo ha dejado a la Iglesia universal encíclicas, numerosas exhortaciones y homilías pero también el legado de cómo su vida fue un testimonio del don de santidad que desafía a la Iglesia entera y la confía a cada uno de nosotros hoy para seguir su mismo camino", dijo el Purpurado, ante los participantes en la Misa entre los que se encontraba una delegación de fieles polacos.
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"Hace dos años moría Juan Pablo II. Una partida para la Casa del Padre que ha podido ser vista por los ojos de todos, acompañada de un gran afecto y dolor pero también de la oración, de la solidaridad y el reconocimiento al Santo Padre moribundo", indicó el Cardenal, quien durante 40 años fuera secretario personal del Papa Wojtyla.
"Cotidianamente vemos como su mensaje permanece actual. Él ha sido el Papa de la vida, desde la concepción hasta la muerte natural. Nadie como ha él ha luchado por esto y por la dignidad de cada hombre y mujer y del género humano".
Hoy en Roma las celebraciones continuarán con la Misa vespertina que el Papa Benedicto XVI oficiará por el Papa peregrino.