El Obispo de Nueve de Julio, Mons. Martín de Elizalde, indicó que la catequesis "dispone para la vida cristiana", por lo que este objetivo debe "estar siempre como la preocupación primera, tanto en los padres que piden para sus hijos la formación en la fe, como para los catequistas", en una carta a los catequistas con motivo del inicio de las actividades de este año.
El Prelado explicó también que "la catequesis no es sólo la preparación inmediata, rápida y somera, para recibir los sacramentos de la iniciación cristiana, sino que por una adecuada instrucción requiere que se unan lo intelectual y lo práctico, la acción cristiana y la oración, el testimonio exterior por la caridad y el apostolado y la interioridad de la fe".
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Tras resaltar que la familia debe acompañar la catequesis con "el necesario acompañamiento por el testimonio y el estímulo, el ejemplo y la participación", el Prelado subrayó que "el Evangelio es la gran invitación, el medio eficaz, que Dios nos dirige para ser felices, para vivir con justicia, para hacer el bien, para alcanzar la vida eterna en su familia grande, que es la Iglesia".
"La catequesis es camino de santidad para los que la reciben, lo es para sus familias, que tienen así una oportunidad espléndida para renovar su fe y fortalecer su participación eclesial, y es un medio de santificación para los mismos catequistas, que se dejan impregnar en su propia vida por los misterios sagrados y por la doctrina que trasmiten", dijo.
"Pidamos para que haya siempre muchos y generosos catequistas. A ellos, de manera especial, los animo para que en el cumplimiento de su misión, alcancen para la Iglesia el fruto esperado y experimenten siempre mucha paz y alegría", concluyó.