La justicia costarricense determinó que la Iglesia en el país debe recomendar a los profesores de religión, luego que un maestro presentara un recurso de amparo en contra de esta disposición.
De acuerdo a lo establecido por el artículo 34 de la Ley de Carrera Docente de 1975, la Iglesia en Costa Rica es la encargada de recomendar a los profesores de religión. Alegando que esta disposición afectaba su derecho al trabajo en igualdad de condiciones, el ciudadano de apellido Trejos presentó la demanda ante la Sala Cuarta, medida que fue rechazada el pasado 24 de enero.
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Ante esta disposición, el Presidente de la Conferencia Episcopal de Costa Rica (CECOR), Mons. José Francisco Ulloa, expresó su beneplácito y resaltó que "la Conferencia Episcopal es la responsable de garantizar que se imparta la verdadera religión católica. La Conferencia Episcopal es la que debe poner los requisitos, porque sino pueden impartir cualquier tipo de religión".
El también Obispo de Cartago indicó que en ningún momento la Iglesia discrimina a las personas o se falta a la justicia, pero como en todo, se requiere cumplir con ciertos requisitos para aspirar a un cargo, de la misma manera que lo hacen los profesores de matemática, por ejemplo.
"La Iglesia busca que los profesores de religión sean verdaderos católicos, egresados de la Universidad Católica y que su testimonio de fe concuerde con el católico practicante", precisó el Prelado.
Actualmente existen más de mil profesores de religión en las escuelas y colegios del país, a quienes la Iglesia les da seguimiento para verificar que cumplan adecuadamente su labor.