Un político que se reclama católico, sea de izquierda o de derecha, no puede aprobar el aborto, advirtió este viernes Mons. Alejandro Goic, Presidente de la Conferencia Episcopal Chilena, luego que el parlamento diera paso a un proyecto de ley para legalizar el aborto bajo el membrete de "terapéutico", bajo cualquier circunstancia.
El jueves por la tarde, el Presidente de la Cámara de Diputados, Antonio Leal, acogió a trámite el proyecto de ley para restablecer el aborto terapéutico presentado por legisladores de la coalición gobernante, aunque el representante de Parlamentarios por la Vida, Francisco Chahuán, anticipó que el texto podría ser rechazado por inconstitucional y atentar contra la vida.
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El texto fue entregado por diputados del Partido Socialista, Por la Democracia y Radical Socialdemócrata, que junto a la Democracia Cristiana forman la Concertación de Partidos por la Democracia, coalición que gobierna el país desde 1990. El grupo de parlamentarios estuvo encabezado por Marco Enríquez-Ominami (PS), vocero de los principales lobbies abortistas y feministas de Chile.
En una entrevista concedida al diario "La Segunda", Mons. Goic advirtió que "obviamente nosotros vamos a decir nuestra palabra clarísima sobre ese tema"; y destacó que, si estre proyecto llega a votación, "un parlamentario católico, esté en la derecha o en la izquierda, no puede apoyar una ley de aborto, porque si no es esquizofrenia".
"Con los adelantos de la medicina en ninguna parte del mundo se habla de aborto terapéutico", dijo también Mons. Goic en la entrevista. "Aquí algunos que se creen muy avanzados, están atrasadísimos. ¿Por qué no son sinceros y dicen lo que queremos es el aborto y este es el primer paso?", agregó.
El Prelado también se refirió al derecho de la Iglesia a anunciar la verdad cuando se trata de temas públicos, como el reciente debate en torno a la píldora del día siguiente, donde el Episcopado chocó con el gobierno de turno.
"Voy a morir en el intento de decir lo que tengo que decir y hacer lo que tengo que hacer, le guste o no al gobierno de turno. El pastor no está para agradar a los gobiernos. A Jesús, decir lo que dijo y hacer lo que hizo, lo llevó a la cruz; lo mataron. A nosotros no nos van a matar físicamente. Pero antes nos decían comunistas, ahora retrógrados y conservadores, por la defensa del mismo principio: el derecho a la vida", explicó el Presidente del Episcopado chileno.
"Hay personas que buscan reducir a la Iglesia al ámbito de lo privado, sin ninguna incidencia en la vida. Y eso es grave. La Iglesia tiene el derecho a dar su opinión sobre los grandes temas de la sociedad", concluyó el Prelado.