Durante el encuentro sostenido en la mañana del viernes con los miembros de la Inspección General de Seguridad Pública del Vaticano, el Papa Benedicto XVI utilizó la figura del guardián para referirse a la tarea de todo cristiano de ser “guardián de su hermano”.
Al referirse la seguridad que este cuerpo proporciona a los peregrinos, el Pontífice señaló que “esta es una reflexión válida para cada uno de nosotros: todos estamos llamados a ser custodios de nuestro prójimo”.
El Señor nos pedirá cuentas de la responsabilidad que se nos ha confiado