Los obispos católicos de rito caldeo y sirio en Turquía, Mons. François Yakan y Mons. Yusuf Sag respectivamente, señalaron que tienen grandes esperanzas de que la reciente visita de Benedicto XVI ayude a mejorar la situación de los refugiados iraquíes en este país.
Ambos obispos hicieron un llamado a los países de la comunidad europea para que abran sus puertas a los refugiados iraquíes cristianos, pues ninguna puerta se abre para ellos.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Mons. Yakan denunció que “cada día, cinco o seis personas, parientes de alguien de nuestra comunidad en Estambul, son asesinados en Irak. El regreso a su patria es algo totalmente impensable en este momento”
“No hay lugar para los cristianos iraquíes en su propio país, como sí lo hay para los sunis, los shiitas o los kurdos. Muchos cristianos se vieron obligados a salir de Irak hace un tiempo y no pueden ahora regresar a su patria, donde además, encontrarían otras personas ocupando sus casa y labrando sus campos”, señaló Mons. Yakan.
Según Mons. Sag, quien asiste 174 familias en su diócesis, “se trata de una catástrofe humanitaria. Les pido que continúen rezando, y aunque algunos puedan estar cansados de hacerlo, debemos estar siempre seguros de algo: Dios está siempre cuidándonos”.