"Ha sido probado en lo físico y psicológico, pero está vivo", informó el Obispo Auxiliar de Bagdad, Mons. Shlemon Warduni, al saberse la liberación del P. Douglas Al Bazi, ocurrida ayer en la noche en Bagdad.
Al respecto, el Prelado iraquí comentó que la noticia ha sido recibida "con alegría por toda la comunidad cristiana iraquí y la caldea en particular" y no reveló si es que se pagó o no un rescate por su liberación, según informa la agencia SIR.
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"La situación para la minoría cristiana es crítica y debemos prestar mucha atención. En Irak las cosas están cada vez peor, aunque nos alegramos con esta bella noticia y seguimos rezando", añadió Mons. Warduni.
El caso del P. Al Bazi es el cuarto secuestro de un sacerdote caldeo y ha sucedido solo un mes después de que un sacerdote sirio-ortodoxo de Mosul fuera terriblemente asesinado después de permanecer durante varios días secuestrado.
Con éste último caso, el número de representantes cristianos secuestrados en Irak ha subido a ocho.