El Arzobispo de Bamberg, Mons. Ludwig Schick, recibió por undécima vez el galardón de oro del deporte alemán y recordó que "las personas deben saber que el cuerpo es un don de Dios, y como tal debe ser bien cuidado".
Según informó la agencia Kath.net, el Arzobispo de Bamberg participó este año nuevamente de las pruebas de resistencia y potencia por el galardón del deporte alemán, en la que corrió 50 metros en un tiempo de 8.08 segundos. Debido a su marca, los medios lo llaman "el obispo más veloz de Alemania".
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El Prelado, de 57 años de edad, participó en otras pruebas. Nadó 200 metros en 6,57 minutos y logró 2,20 metros en salto largo sin impulso. Superó su anterior marca de 2,02 metros; lanzó una bala de 10 kg. a 9,60 metros y logró recorrer tres kilómetros en 15,12 minutos.
"Participo con mucho gusto de estas pruebas -señaló Mons. Schick- pues es importante que la Iglesia se esfuerce tanto espiritual como físicamente, es bueno siempre recordar que el cuerpo es un don de Dios, y debe ser por tanto bien cuidado".
El representante del galardón deportivo alemán de la región de Bamberg, Heinrich Hoffmann, y el encargado de las pruebas, Manfred Ratzke, hicieron entrega a Mons. Schick por undécima vez, del galardón de oro al cual este año nuevamente se hizo acreedor.