El Arzobispo de Buenos Aires, Cardenal Jorge Bergoglio, presidió el domingo, la Misa Arquidiocesana de Niños en el estadio del Club Vélez Sarsfield, e invitó a los millares de menores presentes a "construir espacios de amor en la ciudad, para que no haya niños con hambre, abandonados o que tengan que revolver la basura para comer".
El Purpurado recordó que "hay chicos que no tienen qué comer, hay chicos que están en la calle revolviendo la basura para comer, hay chicos que están limpiando los vidrios en vez de ir a la escuela, hay chicos que están enfermos, pero, sobre todo, chicos que no conocen a Jesús".
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Tras reiterar su pedido de alcanzar "espacios de amor en la ciudad", el Cardenal Bergoglio dirigió una serie de preguntas que los niños respondieron con gran entusiasmo, para luego invitarlos a "mirar un minuto en silencio a la Virgen y desde el corazón, pídanle a Ella que es la Madre, que nos ayude a crear espacios de amor en la ciudad".
Junto con las ofrendas, los niños entregaron las alcancías donde recolectaron dinero, fruto de una campaña solidaria previa, para los comedores infantiles de los sectores más pobres de la ciudad.
En el momento de las peticiones, los niños pidieron ser justos y solidarios, poder ser felices, que todos puedan estudiar, que los padres enseñen desde el amor, por aquellos que están tristes, solos y enfermos y por los ancianos que necesitan compañía.