El primer Museo europeo de Protección de la Vida fue bendecido a finales de julio pasado en la ciudad austriaca de Schrems, en el cual se exhiben el milagro de la vida como también las heridas profundas que produce la finalización de una vida a través del aborto.
Se expone también una inmensa cruz, hecha con instrumentos clínicos utilizados para realizar abortos, que fueron recolectados en una clínica abortista ya clausurada, donados por la organización "Vida Humana Internacional" (HLI). Por gestiones de HLI, organización fundada en Nueva York por el sacerdote Paul Marx, se ha conseguido clausurar ya dos grandes clínicas abortistas, tanto en esta ciudad como en Salzburgo.