El Arzobispo de Lima, Cardenal Juan Luis Cipriani, recordó que "la Iglesia no defiende ni autoriza la pena de muerte" que propuso esta semana el Presidente del Perú, Alan García, para castigar a los violadores de menores que asesinen a sus víctimas.
En un comunicado emitido recientemente, el Purpurado señaló que el Compendio del Catecismo señala que "muy rara vez se debe acudir a esta alternativa para resolver un problema de la sociedad".
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Asimismo, el Arzobispo de Lima indicó que si bien "el sentir del pueblo es importante", es "más trascendental" que "quienes gobiernan y legislan se dejen iluminar con más serenidad para poder estudiar estas cosas".
El Cardenal Cipriani también propuso establecer de una comisión de urgencia, que no tenga carácter político, para investigar en el plazo de seis meses alternativas a la propuesta del restablecimiento de la pena de muerte, anunciada por el mandatario peruano.
Además, pidió al Estado evaluar su labor en las escuelas, municipios y tribunales, para prevenir este delito sexual contra los menores y subrayó que el "gran desafío" de la sociedad peruana "es la educación moral".
También rechazó la "mutilación porque la Iglesia no lo aprueba, ya que no somos dueños de nuestro cuerpo para mutilar a nadie", en alusión a las propuestas de castración física y química como alternativas a la pena capital.
Los principales detractores de la medida, entre ellos los ministros peruanos de Exteriores, y de Justicia, y varios defensores de derechos humanos, consideran que ésta no resuelve el problema de los abusos sexuales y obliga a Perú a denunciar al tratado de San José de Costa Rica.