El semanario Cristo Hoy lanzó una campaña de oración por la salud de Laura Figueroa, la madre argentina embarazada que decidió posponer un tratamiento contra el cáncer que padece para salvar la vida de su noveno hijo.

Según informó Cristo Hoy, Laura "se encuentra en la etapa terminal de su enfermedad. El diagnóstico es metástasis cerebral, considerado irreversible".

Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram

Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:

Hace dos semanas, el 12 de julio nació el pequeño Pedrito con solo 27 semanas de gestación y pesando 1,100 kg. El estado del bebé también es grave. "Aunque ya se descartaron problemas respiratorios, tiene conflictos renales provocados por los inconvenientes cardíacos. El bebé sigue en terapia intensiva de neonatología", indicó el semanario.

La abuela Vicenta, madre de Laura, declaró a Cristo Hoy que "están todos muy unidos luchando y rezando". Según la publicación, Doña Vicenta "a pesar de los sufrimientos se encuentra íntegra cuidando tanto a su hija como a sus nietos. Siente enormemente el apoyo que recibe de sus otros hijos. Los cuales en los tiempos difíciles le supieron recordar, no con palabras, sino con hechos la verdadera esencia de una familia con base sólida y valores claros".

Los ocho hermanos del pequeño "están ansiosos por conocer al nuevo integrante de la familia y esperan tener pronto en sus manos la foto que les prometió la pediatra. Invitamos a todos los lectores del semanario a unirse en oración con esta familia y pedir especialmente por la salud de este modelo de mamá y de su bebe", señala Cristo Hoy.

La historia

Laura Alejandra Figueroa tiene 39 años de edad y ha conmovido a la sociedad argentina con su valiente testimonio.

Hace unos meses, esta nueva madre coraje confesó a Cristo Hoy que con su decisión quiere mostrarle su amor "a este hijo que viene de la misma manera que les mostré a los otros que tengo. Quiero que mi hijo sepa que lo amo y que lo voy a amar siempre, que voy a dar mi vida si es necesario".

En marzo pasado le diagnosticaron cáncer de mamas y le plantearon un tratamiento de quimioterapia que arriesgaría seriamente la vida del bebé que llevaba en el vientre, por lo que decidió esperar hasta su nacimiento.

Laura explicó que con su decisión ha puesto en primer lugar la vida de su hijo. "Es lógico que no pretendo descuidar mi salud, ya que tengo la responsabilidad de proteger mi propia vida y la de mi bebé, pero no obstante esto, evito todo lo que, por amparar mi salud, pueda afectar la de mi hijo", indicó.

Además, quiso que su testimonio ayude a quienes defienden la vida desde la concepción. "Hoy, más que nunca, hay personas que están en contra de la vida, que hoy se quiere legalizar el aborto, al que considero un crimen abominable, por esto pido que este testimonio sirva para que los que lo lean se animen a defender la vida por nacer. Me gustaría que todas las mujeres que están esperando un hijo tengan en cuenta que ninguna situación, por dura que sea, justifica quitar la vida del bebé que llevan en su seno. Ni siquiera en caso de violación o de riesgo de la propia vida", sostuvo Laura.