En un telegrama dirigido hoy al Arzobispo de Madrid, Cardenal Antonio María Rouco Varela, con motivo del tránsito a la Gloria del Cardenal Angel Suquía Goicoechea, el Papa Benedicto XVI destacó el celo y la caridad pastoral de quien fuera Arzobispo Emérito de esta misma sede y Presidente de la Conferencia Episcopal Española durante varios años.
Luego de reconocer estar “profundamente entristecido” por el fallecimiento ayer en San Sebastián del Purpurado de 89 años de edad, “después de una larga enfermedad vivida con gran serenidad”, el Pontífice encomendó a la misericordia del Padre celestial a este “celoso pastor que con tanta caridad pastoral ha servido a su pueblo”.
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"Su generosa e intensa labor ministerial, primero como Obispo de Almería, luego como Obispo de Málaga, Arzobispo de Santiago de Compostela, y más tarde como Arzobispo de la arquidiócesis de Madrid-Alcalá, siendo también durante algunos años Presidente de la Conferencia Episcopal Española, testimonia su gran dedicación a la causa del Evangelio, a la vez que da prueba de su profundo amor a la iglesia”.
Finalmente, el Santo Padre impartió la “confortadora bendición apostólica” a la comunidad eclesial de Madrid que en estos momentos “llora a su amado pastor”.