Después de casi 70 años, la comunidad católica de Tsarskoe Selo, vecina de San Petersburgo, recuperó el uso pleno del histórico templo de San Juan Bautista, confiscado por la dictadura comunista en 1938.
El último sábado se oficializó la entrega en una celebración con representantes del poder civil, de diversas confesiones que existen en la ciudad, y gran cantidad de periodistas locales. También estuvieron presentes algunos feligreses sobrevivientes que fueron testigos de la confiscación del templo.
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Al final de la celebración, el Arzobispo de Moscú, Mons. Tadeusz Kondrusievich, bendijo el Ícono de la Madre de Dios de Fátima “En ti la Unidad”, en el que largamente han trabajado el párroco de la parroquia de San Juan Bautista y el iconógrafo Ivan Lvovich.
Hace tres años la parroquia fue consagrada al Corazón Inmaculado de María pidiendo ayuda para la devolución del templo y la última fiesta parroquial de San Juan Bautista coincidió con la memoria litúrgica del Corazón Inmaculado. El Párroco Aleksandr Burgos está convencido de que es el signo de María que sigue ayudando en Rusia.
El templo de San Juan Bautista fue construido en 1826 y en su cripta fueron enterrados muchos de los más ilustres católicos de Rusia en el siglo XIX, como la princesa Lovich, esposa del zarevich Konstantin o el Conde de Litta, que fue ministro del gobierno ruso con cuatro zares sucesivos.
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