El Nuncio Apostólico en España, Mons. Manuel Monteiro, señaló que “el hombre es ontológicamente libre, pero no moralmente, porque está obligado en conciencia a buscar la verdad en todos los aspectos”.
Durante el 17º Simposio de Historia de la Iglesia en España y América realizado en Sevilla, el Prelado también se refirió a la dignidad del hombre y la mujer, defendida y promovida por la Iglesia a lo largo de su historia. Mons. Monteiro dijo que la dignidad humana “está cada vez más clara en la conciencia de los hombres de nuestro tiempo” e indicó que “para que la conciencia no sea violada ni violentada, es necesario que sea veraz y acorde con la persona humana”.
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Asimismo, el Nuncio recordó que “la Iglesia no pide privilegios”, sino que “desea enunciar a los hombres el amor de Dios y construir así una sociedad donde imperen el amor y la caridad”. En ese sentido, explicó que la libertad religiosa es un “derecho natural” que debe convertirse en derecho civil, porque está fundado “en la dignidad misma de la persona”.
Añadió que para fundamentar esta libertad “es imprescindible reconocer el derecho del hombre a buscar la verdad, a seguir su conciencia y admitir el carácter libre y sobrenatural del acto de fe”.
El Nuncio Apostólico en España advirtió que el ejercicio de la libertad no debe hacer olvidar al hombre su condición de “ser creado”y pidió a los feligreses un “compromiso dinámico” que los lleve a la “acción de testimonio que puede ir hasta las últimas consecuencias” y en la que el ser humano “encuentra la plena realización de sí mismo”.
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