En medio de la reapertura del debate en España sobre la eutanasia a raíz de la reciente muerte de Jorge León, la pentapléjica Olga Bejano y el tetrapléjico Juan Carlos Carrión reafirmaron que no tienen ningún deseo de morir porque sus vidas son “totalmente dignas” y reclamaron de la Administración la ayuda necesaria “antes que promover la eutanasia”.
El diario La Razón recoge el testimonio de Olga Bejano, una pentapléjica de La Rioja que defiende la plena dignidad de su vida pese a sus padecimientos. “Llevo 20 años sin poder salir de casa. No puedo hablar, ver, comer y respirar sin ayuda artificial. Pero mi vida es totalmente digna. Sufro dolores crónicos, fiebres casi a diario, tengo tres costillas rotas, infecciones y además tengo que luchar contra problemas familiares, burocráticos, sociales y políticos. ¿Acaso el señor Zapatero cree que soy una ‘superwoman’?”.
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Pese a ser una acérrima defensora de la vida, al ser preguntada sobre el caso de León, Bejano pide no ser manipulada “ni a favor ni en contra de la eutanasia, porque cada persona es un mundo y entiendo que haya quien no quiera vivir”.
En su testimonio difundido por el diario español, Bejano aboga por las ayudas y rechaza la eutanasia. “Hay quien habla de muerte digna, pero lo que se debe hacer es ofrecer ayudas”, asegura la mujer revelando la insuficiencia de la pensión que recibe para cubrir los gastos de su enfermedad.
Bejano reafirma su decisión de seguir viviendo “porque sé que si Dios permite que esté así es por algo, y estaré así hasta que Él decida”. “Mi vida tiene más calidad desde que hace 5 años comenzó a ayudarme la unidad de cuidados paliativos de La Rioja, aunque son las experiencias que he tenido las que me ayudan a seguir adelante”, señala.
Respecto a la ayuda que reclama a la Administración, Bejano resalta que “si yo tuviese las ayudas necesarias, por las que llevo luchando veinte años, sería la enferma más feliz del planeta”.
Clamor por la vida silenciado
Otro testimonio a favor de la vida y contra la eutanasia es el de Juan Carlos Carrión, un tetrapléjico de Cartagena, que a sus 41 años vive casi totalmente inmovilizado. Según Carrión, en España son miles los tetrapléjicos y pentapléjicos “que queremos vivir, muchos más que los que quieren morir, aunque estemos silenciados por la opinión pública”.
Tras sufrir un accidente de tráfico, Carrión está en silla de ruedas desde los 17 años. Lleno de vitalidad, ha constituido una empresa de automóviles especiales para personas en su situación y expresa que no tiene deseos de morir. “No tengo ningunas ganas de morirme, y no creo que nunca me apetezca demasiado”, dice.
Carrión denuncia que el caso de León “ha vuelto a ser utilizado y manipulado por parte de ciertos grupos que ya están recordando al PSOE su promesa electoral de legalizar la eutanasia”.
“El tema de la mal llamada ‘muerte digna’ es una tapadera en una sociedad cada vez más deshumanizada, que ha perdido sus principios éticos y religiosos, que permite quitarse de encima a quien estorbe, sea un ancianito o un enfermo Terminal”, afirma. Esto “supone una contradicción, porque un auténtico Gobierno socialista y progresista debería buscar primero soluciones para quienes queremos vivir y no centrarse sólo en las demandas de unos pocos que desean morir».