El Arzobispo de Bogotá, Cardenal Pedro Rubiano, condenó la “violencia demencial” de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que el jueves pasado atentaron contra buses alimentadores de Transmilenio, dejando dos niños muertos y 22 heridos.
Durante su homilía de Domingo de Ramos, el Purpurado pidió orar y reflexionar sobre la realidad del país, así como reafirmar el valor de la vida, porque “nos duele la muerte violenta de tantos niños”.
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“Se trata de una violencia demencial. Yo diría diabólica, que es capaz de mover a unos hombres desalmados para incendiar autobuses donde se moviliza gente sencilla a su trabajo, donde van ancianos, jóvenes, hombres, mujeres, y eso merece un rechazo categórico porque la vida es sagrada”, afirmó el Cardenal.
Indicó que lo sucedido debe sacudir la indiferencia de los colombianos para que todos rechacemos cualquier tipo de violencia, en especial contra los niños.
El atentado terrorista ha sido atribuido a células de la red urbana Antonio Nariño de las FARC, y ha generado protesta e indignación en la población.