Ante miles de peregrinos reunidos en la plaza San Pedro, el Papa Benedicto XVI rezó el ángelus dominical e invitó a los cristanos a seguir el ejemplo de San José para cumplir con fidelidad, simplicidad y modestia el Plan de Dios para cada uno, siguiendo el ejemplo de San José, cuya fiesta se celebra hoy.
Al iniciar sus palabras, el Santo Padre hizo referencia a la Solemnidad de San José, y recordando al santo que “unió a Jesús con la descendencia davídica, de modo que, realizando las promesas sobre el Mesías, el Hijo de la Virgen María puede llamarse verdaderamente ‘hijo de David’”.
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Asimismo lo definió como “auténtico heredero de la fe de Abraham: fe en el Dios que guía los eventos de la historia según su misterioso designio de salvación”.
Seguidamente afirmó que “su grandeza resalta aún más porque su misión se ha desarrollado en la humildad y en lo escondido de la casa de Nazaret”.
Antes de iniciar el ángelus exhortó a seguir el ejemplo de San José, quien nos invita a “desarrollar con fidelidad, simplicidad y modestia la labor que la Providencia nos ha asignado”.
Se dirigió a los padres de familia para que “sepan siempre apreciar la belleza de una vida simple y laboriosa, cultivando con premura la relación conyugal y cumpliendo con entusiasmo la gran y no fácil misión educativa”.
Y a los sacerdotes: “Que San José os obtenga amar a la Iglesia con afecto y plena dedicación, y sostenga a las personas consagradas en su gozosa y fiel observación de los consejos evangélicos de pobreza, castidad y obediencia”.