En una de las más duras críticas lanzadas al régimen del Presidente Hugo Chávez, el Cardenal Rosalío Castillo Lara acusó al actual gobierno venezolano de haber “perdido el rumbo” y de tener “visos de dictadura”.
El retirado Cardenal salesiano, que durante años sirvió en el Vaticano como Presidente de la Administración del Patrimonio de la Santa Sede, presidió el 14 de enero la multitudinaria Procesión de la Divina Pastora, una devoción mariana que atrae a más de 2 millones de venezolanos a la ciudad de Barquisimeto.
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Aunque la gran mayoría de la homilía del Purpurado se centro en reflexionar sobre los valores espirituales de la fiesta y las raíces católicas de Venezuela, los párrafos finales de su texto escrito descargaron duras críticas al régimen de Chávez.
“En esta solemne ocasión deseo proponerles que todos juntos le pidamos fervorosamente a la Divina Pastora que salve a Venezuela”, dijo el Cardenal, al señalar que “nos encontramos en una situación de extrema gravedad como muy pocas en nuestra historia”.
“Un gobierno elegido democráticamente hace siete años ha perdido su rumbo democrático y presenta visos de dictadura, donde todos los poderes están prácticamente en manos de una sola persona que los ejerce arbitraria y despóticamente; no para procurar el mayor bien de la nación, sino para un torcido y anacrónico proyecto político: el de implantar en Venezuela un régimen desastroso como el que Fidel Castro, a costa de tantas vidas humanas y del progreso de su nación, ha impuesto a Cuba”, dijo el Cardenal Castillo Lara.
“Los siete años de gobierno –advirtió- ofrecen abundantes muestras de cómo será el futuro de Venezuela si este régimen se perpetúa”.
Entre los riesgos, el Purpurado señaló: “la disidencia, apenas tolerada, es, en muchos casos, perseguida. Los tribunales sentencian injusticias en nombre de la ley; hay varias decenas de prisioneros políticos, mientras la delincuencia común aumenta y ofrece un trágico saldo de más de diez mil homicidios por año. La corrupción, -que se había propuesto eliminar radicalmente-, se multiplica ante el silencio y la inactividad complaciente del Contralor General de la República hasta producir varios miles de nuevos ricos millonarios. Al mismo tiempo crece la pobreza, abunda el desempleo, trágica situación que las llamadas Misiones logran apenas disimular”.
El Cardenal advirtió que “el altísimo precio del petróleo que permitiría solucionar muchos problemas está siendo utilizado a través de ultra millonarios regalos para obtener de otras naciones una incierta fidelidad política, mientras en Venezuela se siente dolorosamente la falta de intervenciones y trabajos para acondicionar los hospitales desprovistos de lo necesario, de reparar las vías de comunicación, las calles de las ciudades, la construcción de viviendas y centros educativos”.
Más aún el Cardenal Castillo Lara comparó el posible futuro con Chávez como “una gravísima situación que bien puede compararse con la epidemia de peste que hace 150 años motivó la intervención milagrosa de la Divina Pastora”.
nos encontraremos sometidos a una dictadura de tipo marxista