El Arzobispo católico-caldeo de Kirkuk, Mons. Louis Sako, comunicó a los musulmanes de Irak su disposición para el diálogo, pero advirtió que pretender aplicar la sharia o ley musulmana en la nueva Constitución del convulsionado país es incompatible con los anhelos de democracia.
En entrevista al periódico alemán Tagepost, el Arzobispo exhortó a los musulmanes a una “nueva lectura de su religión”, para asegurar el futuro del Islam. “Deben buscar renovarse”, dijo.
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A los musulmanes corresponde también una nueva lectura del cristianismo, renunciando a verlo desde un ángulo negativo para poder permitir el diálogo que, de otra forma, sería imposible. “Los cristianos –señaló el Prelado– están muy dispuestos al diálogo, pero no la otra parte, pues para ellos el Islam es la perfección de la religión”.
Mons. Sako consideró muy peligroso considerar el Islam como fuente fundamental de la Constitución iraquí. “El derecho islámico de la sharia y la democracia son incompatibles”, opinó el Prelado.