Una experta en temas de defensa de la vida denunció la manipulación del lenguaje de quienes promocionan la píldora del día siguiente, con el único objetivo de ocultar su potencial efecto abortivo.
En el artículo “¿Es abortiva la AOE?”, publicado por el diario peruano El Comercio, la Dra. Maíta García Trovato advirtió que esta actitud es más que evidente cuando se llama eufemísticamente a la mencionada pastilla: Anticoncepción Oral de Emergencia, como si se tratara de un anticonceptivo más pero de “emergencia”.
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Añadió que producto de esta desinformación, la discusión sobre la pastilla ya no se centra en los tres mecanismos que el fármaco produce, entre los cuales se cuenta la posibilidad de impedir la implantación del óvulo fecundado en el útero materno, que no es otra cosa que suprimir a un ser humano recién concebido.
“El embrión, desde el momento mismo de la fecundación, constituye un ser con identidad genómica propia, con un sexo definido, y posee los elementos y la capacidad necesarios para comandar su propio desarrollo. Cuando se implante en el útero, se llamará feto. Al nacer, se llamará niño. Nunca dejará de ser humano”, recordó.
García Trovato señaló que estudios avalados por la Food and Drug Administration (FDA) de EE.UU. alertan sobre el efecto abortivo de la pastilla y los laboratorios Grünenthal y Recalcine, que la comercializan en Chile, se pronuncian también en ese mismo sentido.
“En el Perú para promover este producto se utiliza la misma estrategia seguida en los países en donde el aborto es ilegal, donde sólo se ha cambiado la definición de embarazo y se ha tomado una nueva acepción para la palabra aborto”, añadió.
La experta advirtió que “se pretende confundir a la opinión pública presentando el embarazo como si este diera origen a un nuevo ser, cuando en realidad es el nuevo ser el que da origen al embarazo”.
La polémica sobre la píldora del día siguiente resurgió esta semana en el Perú luego de conocerse una sentencia de un juzgado civil de Lima que aceptó una acción de amparo y ordenó al Ministerio de Salud suspender la distribución del fármaco hasta implementar una adecuada política de información sobre todos los efectos y alcances del mismo
hasta que no se descarte su efecto abortivo