El Arzobispo de Viena, Cardenal Christoph Schönborn, invitó a los alumnos y profesores de las escuelas de Viena a debatir y conversar sobre el tema de la Creación y Evolución.
“La fe bíblica que nos muestra a Dios como Creador, y lejos de obstaculizar a la Ciencia, por el contrario la promueve”, escribió el Purpurado en el Infome de la oficina de educación del Arzobispado de Viena, en el que se refirió al comentario que hizo al New York Times, difundido por el mundo entero, en el que además de hacer algunas aclaraciones sobre la Doctrina de la Iglesia respecto a la Creación, invitaba también al diálogo e intercambio interdisciplinario pertinente sobre el tema.
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“Desde hace 30 años me he ocupado intensamente de estas preguntas, y cada vez me convenzo más de la fe bíblica en Dios como Creador, que no sólo no obstaculiza a la Ciencia, sino por el contrario, la promueve”, señaló el Cardenal.
Ideología de la casualidad
El Arzobispo de Viena resaltó en su artículo del reciente “Informe”, que la teoría de la evolución no es en sí misma incompatible con la fe en el Creador. También señaló que mas que una teoría científica, se estaría delante de una ideología, ya que “supuestamente, desde el punto de vista de los científicos, yendo más alla de los límites, el papel de la casualidad es tan extenso, que por así decir, todas las cosas, desde el 'Big Bang' hasta la novena de Beethoven, son básica, definitiva y incontestablemente fruto de la casualidad”. Un pensamiento tal no sería ciencia, “pues habría limitado todo dentro de una reducción de la realidad según su propia metodología”, lo cual define más bien lo que es una “ideología”.
“Designio Inteligente”
El Arzobispo de Viena señaló que la investigación de las ciencias naturales busca comprender como funciona el “mundo”. La ciencia, sin embargo, sólo podría investigar “sensata y objetivamente”, solamente si descubriese un “sistema” en la totalidad del mundo, y en cada uno de los diseños básicos y órdenes particulares de sus partes.
“Lo sorprendente –señaló el Cardenal Schönborn– no es que podamos reconocer las cosas, sino el que éstas sean reconocibles, como habría dicho Einstein. Precisamente es de esto de lo que se trata el debate, de ver la racionalidad y reconocibilidad del ‘Designio Inteligente’”.