Al celebrar la fiesta de la Asunción en la localidad de Guanabacoa, el Nuncio Apostólico en el país, Mons. Luigi Bonazzi, exhortó a los cubanos y cubanos a velar por la dignidad de todas las mujeres y tratarlas como hijas de Dios.
Según informó la agencia Cubanet, Mons. Bonazzi “apeló a la necesidad de honrar la entidad femenina, tratada como una mercancía y objeto de deseo, asunto denunciado por Juan Pablo II”.
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El Arzobispo “invitó a todas las mujeres, en especial a las de nuestra sociedad y con ellas también a los hombres, para que traten siempre a los demás y a su vez se hagan tratar ellos mismos, como hijos de Dios, de la misma manera que lo hizo María, pues es a través de los hombres y mujeres del mundo que la Madre del Señor desea hacerse presente”.
La agencia reportó que el Nuncio rezó para que María “nos haga crecer cada día en la práctica del Evangelio para como ella hacernos inmaculados en la práctica de la caridad, en el servicio alegre, el amor gratuito y generoso, y en la confirmación de una gran verdad: todo pasa y sólo el amor permanece”.
La fiesta de la Asunción de Guanabacoa se celebra desde hace 300 años e incluye una procesión de una hermosa talla mariana. Luego de décadas de veto, después de la visita del Papa Juan Pablo II a Cuba se permitió recuperar la fiesta.
La Misa fue presidida por Mons. Bonazzi en compañía de Mons. Ramón Suárez Polcari, varios sacerdotes, religiosas, diáconos y fieles.