La Conferencia Episcopal Colombiana (CEC) confirmó el asesinato de dos sacerdotes en Ocaña, norte de Santander, una zona con presencia activa de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
En un comunicado firmado por el Presidente de la CEC, Mons. Luis Augusto Castro, los obispos repudiaron el asesinato de los sacerdotes Vicente Rozo Bayona, 49 años, Jesús Emilio Mora, 60 años, y dos civiles.
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Según la policía, los sacerdotes viajaban el lunes en un vehículo con el contratista Miguel Carrascal, que tenía a cargo la construcción del puesto policial de Teorema, y Edgar Vergel, albañil de la obra. El vehículo recibió ráfagas de fusil desde una montaña y se presume que los atacantes son guerrilleros de las FARC.
Se cree que el objetivo del ataque era asesinar a los trabajadores pues la guerrilla ya había amenazado a quienes laboran en el nuevo puesto policial.
Los obispos consideran que éste es “un crimen atroz que enluta a la Iglesia de Colombia, en particular a los familiares y fieles de las Parroquias de San José de Convención y del Monte Carmelo donde ejercían el ministerio pastoral como Párrocos ejemplares y queridos de sus feligresías”.
“Cualesquiera hayan sido los autores intelectuales y materiales de este hecho violento y sacrílego, lo condenamos como un crimen que deshonra a quienes lo cometieron y atenta contra los anhelos de reconciliación y de paz que la Iglesia viene predicando”, agregaron.