El Vaticanista italiano Sandro Magister señala este viernes en su columna del semanario italiano L’Espresso, que a tres meses de iniciado su pontificado, el Papa Benedicto XVI ha marcado un estilo propio, aunque la mayor parte de los medios masivos, siguen siendo, como se esperaba, hostiles a su figura.
Según Magister, entre los intelectuales católicos “progresistas”, las críticas contra el nuevo Pontífice no se han hecho esperar.
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“Desde las playas de California, el jesuita Thomas Reese... ha liquidado al nuevo Papa como irrecuperable enemigo de la modernidad”; mientras que en Italia, el profesor Achille Ardigò, “gurú de la escuela de Bologna fundada por Giuseppe Dossetti... ha dicho en una entrevista al diario ‘la Repubblica’ que ‘rezo todos los días al Espíritu Santo para que induzca al papa y al Cardenal (Camillo) Ruini a no perseverar en su teología racionalista’”, señala Magister.
El vaticanista italiano, sin embargo, señala que “en compensación, Benedicto XVI ha conquistado las multitudes”.
En vez de aplaudir simplemente las frases efectistas, Magister señala que las multitudes siguen las homilías del nuevo Papa “palabra por palabra, desde el principio hasta el final, con una atención que sorprende a los expertos. Para comprobarlo, basta con mezclarse con las multitudes que asisten a una Misa celebrada por el Papa”.
Magister describe el nuevo estilo del Papa como “sobrio, pero en contacto con las masas”.
Según el experto, Benedicto XVI “ama escribir a mano, en alemán, con una caligrafía diminuta, que saben muy bien descifrar y transcribir sus dos secretarias, Ingrid Stampa y Birgit Wansing, ambas alemanas y pertenecientes al movimiento espiritual de Schönstatt”.
Magister revela las otras personas cercanas al servicio del Papa: Carmela y Loredana, perteneciente a la comunidad de consagradas “Memores Domini”, surgida del movimiento “Comunión y Liberación”, el sacerdote bávaro Georg Gaenswein, que hasta hace poco enseñaba en la Pontificia Universidad de la Santa Cruz, el ateneo romano del Opus Dei.
El vaticanista de L’Espresso también comenta sobre los esfuerzos del nuevo Pontífice por incrementar las relaciones con judíos y ortodoxos.
Su columna puede leerse en inglés en:
www.chiesa.espressonline.it/index.jsp?eng=y