Tanto el Secretario General de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Padre Juan Martínez Camino, como diversos grupos pro-familia, pidieron respeto para el reconocido catedrático y psicoterapeuta que planteó a los senadores la posibilidad de considerar el “perfil psicopatológico” de la conducta homosexual.
Ante la avalancha de insultos contra el catedrático de Psicopatología de la Universidad Complutense, Aquilino Polaino, el vocero de la CEE aclaró que "no es competencia mía ni de los obispos decir qué es enfermedad y qué no; esto lo tienen que decir en un diálogo de libertad los expertos, que basan sus conclusiones en datos; no se puede dirimir con criterios a priori".
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Polaino abordó el "perfil psicopatológico de las personas con conducta homosexual" y basó su exposición en la "investigación de numerosos autores" y su "propio ejercicio en la práctica clínica".
El Padre Martínez reafirmó la Doctrina Social de la Iglesia sobre los homosexuales y recordó que “son hijos de Dios con los mismos derechos y dignidad que los demás y por lo tanto deben ser respetados y tutelados sus derechos como personas"; también precisó que Catecismo de la Iglesia Católica habla de la inclinación homosexual como una conducta "objetivamente desordenada", lo cual "no es imputar culpabilidad".
Respaldo pro-familia
La Federación Española de Asociaciones y Profesionales por la Ética denunció la "manipulación de la que está siendo objeto" Polaino y aclaran que "algunas de las afirmaciones que desde el primer momento están siendo utilizadas para, de manera irresponsable, desprestigiar, insultar y ridiculizar al referido profesional, están burdamente sacadas del contexto en el que han sido expresadas".
Los grupos consideraron que Polaino hizo uso legítimo “de su libertad e independencia en el ejercicio de la actividad profesional y científica” y recordaron que fue citado "como experto científico y no como político”.