Expertos de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA) y el Movimiento Fundar advirtieron que la tragedia de Romina Tejerina, una joven madre que mató a su bebé aduciendo que resultó embarazada en una violación, es utilizada por promotores del aborto para legalizarlo en el país.

En declaraciones a medios locales, el director de Comunicaciones del Secretariado para la Familia de la CEA, Carlos Camián Ariza, y la directora de Fundar, Inés Franck, señalaron que el asesinato no puede ser justificado bajo ningún argumento ni debe ser aceptado como bien.

Camián Ariza recordó que la vida, a pesar “de cualquier consideración subjetiva que queramos hacer” posee “un valor absolutamente infinito e inconmensurable”. Añadió que en el caso de Romina Tejerina, justificar la muerte porque los condicionantes “parecen más importantes que la persona asesinada” es algo que no puede ser aceptado.

Asimismo, advirtió que más allá de la supuesta violación que no fue probada pero sí utilizada por organizaciones que buscaron la absolución de la madre; lo preocupante para la convivencia social es que se empiece “a discriminar, a discernir, a justificar, a calificar como buenos o malos, justificables o injustificables hechos de esta naturaleza”, como si hubiesen “muertes buenas y muertes malas”.

El representante del Episcopado recordó que en Argentina existe “una triste historia sobre iluminados que determinaron (...) quién tenía derecho y quién no para vivir”. Por ello, llamó a no aceptar que la polémica desatada se lleve “a otro territorio” que no sea la defensa de la vida.

No permitir manipulaciones ideológicas

Por su parte, la directora de Fundar, Inés Franck, advirtió que este caso debe ser tratado “con suma prudencia” y no ser dejado “a merced de manipulaciones ideológicas”, porque “sólo un hecho es probadamente cierto: hay un niño que murió víctima de las puñaladas dadas por su madre”.

Asimismo, dijo que este drama habla de “un fracaso social” que corre el riesgo de ser aprovechado por organizaciones anti-vida a las que sólo interesa la despenalización del aborto. Denunció que “hacerlo en esta circunstancia es manipular a la opinión pública” explotando el dolor que este caso ha originado.

“Nadie puede desconocer la aberración del delito de violación. Sin embargo, de la misma manera, una sociedad civilizada y la plausible evolución de la conciencia de los derechos humanos tampoco puede pasar por alto el asesinato de un bebé, máxime cuando una relación de parentesco califica al hecho”, explicó.

La directora de Fundar llamó a los argentinos a no olvidar que “una sociedad que legitima la muerte introduce dinamismos de exclusión que dejan a la vida a merced de los poderosos”.

especialmente de los más inocentes