A vísperas de debatirse en la Cámara de Diputados un proyecto de ley que abriría las puertas al aborto y al “matrimonio” entre homosexuales, el Arzobispo de Asunción, Mons. Pastor Cuquejo, convocó a los feligreses a una movilización este miércoles 25 en la explanada de la Catedral para defender la vida y la familia.
El proyecto, que será debatido el jueves, fue presentado por el senador Carlos Filizzola del Partido País Solidario (PPS), de centroizquierda; y permitirá, de acuerdo a voceros pro vida, la legalización del aborto bajo la excusa de solucionar los embarazos por violación.
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El texto, que lleva por nombre “Programa Nacional de Prevención y Asistencia a las Víctimas de Hechos Punibles Contra la Autonomía Sexual y Contra Menores”, pasó desapercibido desde su aprobación por el Senado en diciembre pasado, hasta que fue descubierto por la organización pro vida estadounidense Focus on the Family.
Diversos expertos han advertido el peligro de aprobar el proyecto, ya que, entre algunas de sus falencias, no exige la comprobación de la violación antes de realizar el aborto. Además, impediría a los padres saber si sus hijas menores han sido víctimas de un aborto al “protegerlas” con una supuesta “confidencialidad”, “intimidad” y “privacidad”.
Por otro lado, defensores de la familia han señalado que el lenguaje ambiguo con el que ha sido elaborado, permitiría en un futuro buscar la equiparación de las uniones homosexuales al matrimonio.
Esto se debe a que en la introducción se habla de “discriminación o violencia de género”, que plantea definir “autonomía sexual” como “opción sexual”, señalando que el sexo que por naturaleza tiene cada persona, carece de importancia.
Además, el proyecto de Filizzola autoriza al Estado a firmar acuerdos con ONG’s – feministas y abortistas– que podrán monitorear el cumplimiento del programa.
Asimismo, se impediría a las autoridades y profesionales ejercer el derecho a la objeción de conciencia, porque se establece sanciones para quienes se nieguen a la realización de los abortos.
Ante esta situación, Mons. Cuquejo llamó a los paraguayos a manifestarse públicamente contra esta ley que atenta contra la vida y el matrimonio, institución que “desde sus orígenes y por naturaleza misma (...) es sagrada e inalterable”.
En un comunicado el Prelado advirtió que durante las últimas décadas “vientos” de relativismo han construido una cultura que no acepta la vida “en su integridad” y que golpea a la familia con “alternativas diferentes a las que la misma naturaleza humana encierra dentro de sí como sagrada”.