El Arzobispo de San Salvador, Mons. Fernando Sáenz Lacalle, señaló que para disminuir la violencia es necesario rehabilitar a los pandilleros y reincorporarlos a la sociedad.
“Respecto a estos hermanos nuestros que han caído en esta trampa fatal de las pandillas, con toda una degradación de valores, es necesario realizar un esfuerzo para darles recuperación”, precisó en rueda de prensa.
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Mons. Sáenz Lacalle llamó a la población a “vivir la solidaridad” y a “poner todo el empeño” en las diferentes iniciativas que apuestan por la recuperación de estos jóvenes. A la vez, el Prelado indicó que es necesario colaborar con las autoridades brindando información que ayude a luchar contra la delincuencia.
Según datos oficiales, del 1 de enero al 30 de abril de 2005 han sido asesinadas más de mil personas, la mayoría a manos de las pandillas.
En la actualidad, el Gobierno realiza el “Plan Mano Súper Dura” para combatir estos grupos que tienen cerca de 10 mil 500 miembros.