La Conferencia Episcopal Española (CEE) presentó este miércoles una nueva campaña que busca fomentar entre los ciudadanos y feligreses el valor “sagrado e inviolable” de la vida humana, y en la que reitera su rechazo al proyecto del Gobierno para investigar con células madre embrionarias.
El secretario general de la CEE, Padre Juan Antonio Martínez Camino, señaló en rueda de prensa que la vida "es un don que no está a disposición de nadie" y que “donde hay un cuerpo vivo hay un ser humano, inviolable, aunque sólo tenga un día, desde el inicio de la concepción", recalcó.
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Durante su intervención, el portavoz episcopal rechazó la posibilidad de investigar con los embriones sobrantes de las técnicas de reproducción asistida realizadas en el pasado, actualmente congelados en las clínicas. "Aunque estén en una situación violenta como es la congelación no se les puede matar y convertirles en cobayas. Yo no sé lo que se puede hacer con ellos, pero hay soluciones. Lo que no se puede hacer es matarles", apuntó Martínez Camino.
“Todos fuimos embriones”
La campaña, que tiene como lema "Todos fuimos embriones", defiende el valor de la vida humana y el precepto bíblico del "no matarás". La iniciativa episcopal recuerda que solo Dios es el "Señor de la vida" y que el embrión "no es un mero agregado de células vivas, sino el primer estadio de la existencia de un ser humano".
Con esta iniciativa, la tercera desde el inicio del gobierno socialista, después de las emprendidas contra la eutanasia y el matrimonio homosexual, la CEE rechaza la investigación con células madre embrionarias, tal y como plantea el Ejecutivo en la futura reforma de la Ley sobre Técnicas de Reproducción Asistida.
Todas las diócesis españolas repartirán un díptico que muestra una secuencia de fotografías que van desde la fecundación de un embrión, el feto y el nacimiento de un bebé para concluir con una pareja y sus tres hijos. "La vida, don precioso de Dios, es sagrada e inviolable", recalca el díptico.
Por otro lado, un documento redactado por la Subcomisión Episcopal para la Familia y Defensa de la Vida con ocasión de esta nueva campaña hace extensivo el rechazo de la Iglesia Católica al aborto y los métodos anticonceptivos, que se sitúan en la "cultura de la muerte".
Ante la intención del PSOE de impulsar el uso de embriones humanos congelados para la investigación, el P. Martínez Camino recordó que "aunque pudieran ser utilizados para la investigación, siendo ya poco viables, no se les puede matar" y precisó que la reforma que planean los socialistas, que "no parte del respeto a la persona humana desde sus primeras horas y días de existencia".