La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) emitió un comunicado en el que exhorta a los líderes políticos y sociales a ejercer con responsabilidad la búsqueda de “un proyecto que favorezca el bien común”.
A pocos días de iniciarse la celebración de la Pascua, la CEB hace “un llamado urgente” para que todo el pueblo boliviano, con sus representantes, “nos comprometamos en la construcción de una nueva sociedad unida, justa y solidaria”.
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El texto señala que ante los últimos acontecimientos que han sacudido al país, la Iglesia “ha resaltado la necesidad de un amplio acuerdo social y político” para retornar a un clima de paz que permita superar los grandes problemas de Bolivia.
Los obispos explican que la profundidad de la crisis se debe a la “falta de soluciones a problemas estructurales y de fondo” que “interpelan seriamente al liderazgo político, social y a la propia institucionalidad del país”.
El texto es claro al señalar que mientras no se afronten “estos desafíos históricos”, no existirá la posibilidad de un futuro viable para la nación. Agrega que es necesario “un cambio radical de actitud y una nueva visión de país en todos los bolivianos”.
La CEB aclara que las demandas planteadas por distintos sectores deben estar dentro de la racionalidad, así como las respuestas a las mismas, “sin caer en el fácil recurso de medidas extremas, por las consecuencias que se derivan de ellas”.
“Llamamos a la serenidad y unidad que debemos tener ante los procesos de cambio que nos demanda la historia”, afirman.
Horas antes de hacerse público el comunicado de la CEB, el mandatario de Bolivia, Carlos Mesa, presentó ante el Congreso una propuesta para adelantar las elecciones generales al 28 de agosto de este año, para elegir un nuevo presidente, vicepresidente, diputados, senadores y constituyentes.