Los católicos brasileños pueden oponerse a una probable reelección del presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, si éste autoriza a la red pública de salud a ampliar la realización de abortos, aseguró hoy un miembro del Episcopado.
El presidente de la Comisión Episcopal Vida y Familia, y Obispo de Nueva Friburgo, Mons. Rafael Llano Cifuentes, manifestó su grave preocupación por la posibilidad que el Poder Ejecutivo facilite más los abortos en el país.
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Los brasileños esperan elegir a un nuevo presidente en octubre de 2006 y la actual legislación permite al mandatario disputar un segundo y último mandato consecutivo.
Según el presidente del Senado, Renan Calheiros, el presidente Lula manifestó ayer que buscará el apoyo de otras fuerzas políticas para hacer que el Partido de los Trabajadores, que lidera, se mantenga en el poder.
Mons. Llano Cifuentes indicó que Lula se quedó preocupado tras la conversación y le aseguró que se opone al aborto. Sin embargo, el Obispo indicó que el presidente es, al menos, incoherente, ya que esta semana el Ministerio de Salud decidió que será más flexible con las mujeres que quieran abortar.
Hasta el domingo pasado en Brasil, las futuras madres sólo podían abortar si representaba un serio riesgo de vida para la madre o si antes justificaban ante autoridades policiales haber sido víctimas de violación. Actualmente, ya no es necesario probar ante la ley que realmente hubo tal violación, bastando la declaración de la supuesta víctima.