En la inauguración de la 84° Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española (CEE), su presidente, Cardenal Antonio María Rouco Varela, reiteró la voluntad de la Iglesia de mantener “relaciones positivas de colaboración” con el Gobierno, a pesar de que diversas cuestiones de la agenda socialista “suscitan serias reservas y aun clara oposición” a una “perspectiva cristiana que asume la ética natural o racional”.
Al referirse a la renovación de los cargos al interior de la Conferencia, principal objetivo de la Asamblea, el Cardenal indicó que las próximas elecciones constituirán “un paso más en la consolidación del espíritu de activa, serena y gozosa colegialidad”. Previamente, el Purpurado había destacado la regularidad institucional de la Conferencia a lo largo de sus 40 años de vida, considerándola un “instrumento providencial para la causa del Evangelio” en la Iglesia española.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
Visita “ad limina”
En su intervención, el Arzobispo de Madrid agradeció al Papa Juan Pablo II “la cálida acogida” y las “palabras luminosas” dirigidas a los obispos con ocasión de su última visita “ad limina” a Roma.
“El Papa nos ha confirmado en nuestros planes apostólicos” de servicio a la vida sacramental de los fieles, de atención a los sacerdotes, y, en especial, a los jóvenes y a los laicos presentes en los diferentes ámbitos de la vida pública”, destacó el Cardenal.
El Purpurado recordó la referencia que hizo el Pontífice a la difusión en España de “una mentalidad inspirada en el laicismo” y, aunque la amplió a las demás sociedades occidentales, evidenció que esta visión “comporta una dificultad especial no sólo para la acción evangelizadora de la Iglesia, sino también para el desenvolvimiento pleno y fluido de la vida social”.
Más adelante, el Cardenal se refirió al encuentro sostenido la semana pasada entre altos directivos de la CEE y del Gobierno español, destacando que a pesar de que diversas cuestiones de la agenda de éste “suscitan serias reservas y aun clara oposición” a una “perspectiva cristiana que asume la ética natural o racional”, los obispos siempre han declarado su “voluntad de mantener unas relaciones positivas de colaboración con las legítimas autoridades del Estado, en el marco del ordenamiento constitucional y de los Acuerdos vigentes entre la España y la Santa Sede”.
Año de la Eucaristía y la Inmaculada
El Purpurado recordó que la 84° Asamblea Plenaria de la CEE se realiza en el Año de la Eucaristía y de la Inmaculada. Sobre el primero señaló que este año “está llamado a suscitar un renacer de la espiritualidad eucarística”, particularmente entre los jóvenes. Asimismo anunció que en breve aparecerá la traducción española de la Institución General del Misal Romano, que ha sido ya confirmada por la Santa Sede.
Sobre el Año de la Inmaculada, el Purpurado indicó que la Iglesia en España se prepara para la peregrinación al Pilar de Zaragoza, el 21 y 22 de mayo próximos. Allí “tendremos ocasión de renovar la consagración al Corazón Inmaculado de María en un ambiente de celebración y adoración eucarística”, anotó.
Además, el presidente de la CEE adelantó la eventual aprobación de la traducción española del Martirologio Romano actualizado hasta el pasado siglo 20, es decir, el catálogo de aquellos que “han dado al mundo un testimonio heroico de Cristo, bien con su sangre, bien con una vida santa”.
Asimismo, el presidente de la CEE se refirió a la 20° JMJ Colonia 2005 a realizarse en agosto, como un “momento decisivo para el crecimiento en la fe de nuestros jóvenes”.
Al concluir su ponencia, el Cardenal Rouco Varela subrayó que la Asamblea se celebra “bajo el signo de la continuidad y la renovación institucionales” de la Conferencia Episcopal.
solemne funeral en la Catedral de la Almudena