El Arzobispo de San Salvador, Mons. Fernando Sáenz Lacalle, declaró que “la violencia se está extendiendo de manera tremenda y ya sabemos que una buena parte de la violencia se debe a ex pandilleros desgraciadamente”.
El Prelado llamó a los delincuentes a reinsertarse en "un plan de recuperación de todos los valores”. poco después de conocer que la Policía Nacional Civil (PNC) informó sobre el asesinato de tres hombres salvadoreños y una mujer nicaragüense en la ciudad de Sensuntepeque.