El Presidente de la Conferencia Episcopal Española y Arzobispo de Madrid, Cardenal Antonio María Rouco, señaló que el laicismo al que se refirió el Papa Juan Pablo II en su mensaje a los obispos nacionales, es un problema común de toda Europa.
“Vemos que la situación en Europa es más o menos igual en todos los países”, afirmó el Purpurado y aclaró que no se trata de “un problema de tipo jurídico” porque existen concordatos firmados con cada país, sino que hay que verlo “desde un punto de vista cultural, espiritual y doctrinal”.
Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram
Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:
El Cardenal Rouco hizo estas declaraciones al programa religioso Mosaico y fueron reproducidas por el diario italiano Avvenire.
Según el Arzobispo, no se puede decir que la Iglesia española esté “bajo asedio” pero sí “existen algunos problemas con la administración pública”. También consideró que el mensaje del Papa criticando el laicismo español no fue “severo” sino que fue un llamado “expresado con fuerza”.
El Cardenal Rouco consideró que el problema actual es un retorno “al positivismo y relativismo y a la separación total entre la dimensión moral y la jurídica”. En este contexto, estimó necesario que “los cristianos asuman la responsabilidad social de lo que significa ser cristianos, evitando vivirlo sólo en el interior de sus casa sin efectos en lo que les rodea”.
Las declaraciones del Purpurado se dieron en el marco de una agitada semana. El mensaje papal no cayó bien al gobierno socialista, que convocó al Nuncio en España, Mons. Manuel Monteiro de Castro, para expresar la “extrañeza” de las autoridades por las palabras del Pontífice. La respuesta del vocero vaticano, Joaquín Navarro-Valls, fue clara: el gobierno debe leer con atención todo el mensaje del Papa.