Más de una docena de los 53 hijos de disidentes cubanos encarcelados celebraron el “Día de los Reyes Magos” y recibieron regalos donados por la Fundación Nacional Cubano-Americana, en una fiesta organizada por las “damas de blanco”, esposas de los 75 presos políticos detenidos en marzo del 2003.
Con globos, guirnaldas y con un árbol de Navidad con un “75” en la parte superior, la celebración contó con la asistencia, entre otros, de los hijos de Héctor Raúl del Valle, condenado a 12 años de cárcel; José Ubaldo Izquierdo, sentenciado a 16 años; y Angel Moya, recluido por 20 años.
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“Son niños que no tienen a sus padres, porque están presos, para que les compren juguetes”, explicó Laura Pollán, esposa de Héctor Maseda, un disidente condenado a 20 años de cárcel.
En total –explicó Pollán–, los hijos de los presos suman 53, de los cuales 13 viven en la ciudad de La Habana o sus alrededores y fueron los invitados a la fiesta. “A los de las provincias se les harán llegar sus regalos”, agregó.
darles dos horas de felicidad